Se está desarrollando un drama judicial que tiene implicaciones que van mucho más allá de una sola demanda: una que podría erosionar la confianza pública y poner en peligro la salud pública. Una demanda presentada por el fiscal general de Texas contra los fabricantes de Tylenol, alegando un vínculo entre el analgésico y el autismo, pone de relieve la peligrosa intersección de la política, la ciencia y el derecho. Este artículo examina la evidencia científica, los precedentes legales y las consecuencias más amplias de este caso.
La ciencia detrás de las afirmaciones y por qué se queda corta
La demanda contra los fabricantes de Tylenol se centra en la afirmación de que el paracetamol (el ingrediente activo) aumenta el riesgo de autismo. Esta afirmación ha circulado durante años en comunidades en línea y foros antivacunas, ganando fuerza gracias al respaldo de figuras como el presidente Donald Trump y el secretario Robert F. Kennedy Jr. Sin embargo, no hay evidencia científica creíble que respalde esta afirmación.
- Desacuerdo de consenso: La Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) y los principales grupos médicos, incluido el Colegio Estadounidense de Obstetras y Ginecólogos, no han encontrado ninguna evidencia que vincule el uso de Tylenol durante el embarazo con afecciones neurológicas.
- Correlación versus causalidad: Si bien algunos estudios observacionales han observado una asociación, estos estudios no prueban que Tylenol cause autismo. Un estudio de 2024 en JAMA, que utilizó controles de hermanos para tener en cuenta factores genéticos y ambientales, no encontró ningún mayor riesgo de autismo o TDAH cuando se consideraron estos factores.
El estándar legal: un empinado ascenso para la ciencia especulativa
Ganar un caso de publicidad falsa o de responsabilidad por productos requiere demostrar que la empresa hizo declaraciones falsas, sabía que eran falsas y que engañaron materialmente a los consumidores: un listón muy alto que hay que superar. Los jueces no evalúan la verdad médica, sino si la evidencia cumple con un umbral legal.
- El Estándar Daubert: En los tribunales federales, el testimonio de los expertos debe ser “científicamente confiable y relevante”, según el estándar Daubert. La ciencia débil o especulativa no pasa esta prueba.
- Falta de evidencia: Texas no ha presentado documentos internos que demuestren que los fabricantes de Tylenol conocían algún peligro potencial para las mujeres embarazadas, lo que sugiere que el caso se basa en ciencia inestable en lugar de evidencia concreta.
Una historia de litigios basados en evidencia
La demanda actual contrasta marcadamente con casos exitosos de protección al consumidor basados en evidencia abrumadora de daño e intención de engañar.
- Litigio sobre el tabaco: Un caso histórico que involucra millones de páginas de documentos internos de la industria demostró que las compañías tabacaleras sabían que la nicotina era adictiva y mortal, incluso cuando lo negaban públicamente. Esto condujo a acuerdos sustanciales.
- Litigio por opioides: Investigaciones similares sobre fabricantes de opioides revelaron memorandos internos que demostraban esfuerzos deliberados por restar importancia a los riesgos de adicción, lo que condujo a acuerdos históricos.
- La diferencia clave: Ambos casos exitosos combinaron evidencia abrumadora de daño con una clara intención de engañar.
El peligro de la especulación sancionada por el Estado
Las consecuencias de la demanda de Tylenol se extienden más allá del resultado legal. Dar autoridad a afirmaciones falsas puede dañar la confianza pública y alimentar la confusión.
- Erosión de la confianza: Las afirmaciones falsas sobre las vacunas ya han erosionado la confianza del público; la especulación sobre los medicamentos de rutina podría hacer lo mismo.
- Percepción pública: Una encuesta reciente reveló que el 77% de los padres han escuchado afirmaciones que vinculan Tylenol con el autismo, y casi un tercio las cree. Entre los republicanos, esta proporción fue del 57%.
- Recursos desperdiciados: Más allá de desperdiciar el dinero de los contribuyentes, la demanda podría desalentar tratamientos seguros y eficaces y socavar la autoridad de los funcionarios de salud pública.
Lo que sucede después y la prueba de credibilidad
- Recusación legal: Si Texas logra hacer avanzar el caso, el tribunal deberá determinar si la evidencia del estado cumple con los estándares científicos y legales, lo que parece poco probable dado el consenso actual.
- Impacto público: Incluso si se desestima la demanda, los titulares iniciales que vinculan Tylenol y el autismo pueden persistir, eclipsando la falta de pruebas.
- El verdadero juicio: En última instancia, el caso es una prueba de credibilidad: si la ciencia se convierte en un arma política, la confianza pública sufrirá daños colaterales.
La demanda de Texas destaca una tendencia preocupante en la que se utilizan acciones legales para difundir información errónea y socavar la salud pública. Sirve como un recordatorio crucial de la importancia de confiar en evidencia científica creíble y evaluar críticamente la información, particularmente cuando proviene de figuras de autoridad. Los procedimientos legales pueden resolverse, pero la erosión de la confianza pública seguirá siendo una consecuencia persistente si no se aborda con transparencia y compromiso con la ciencia.
